La mejor manera de predecir tu futuro es prestar atención hacia donde vas, pero a veces es fácil distraerse en el camino y tomar el rumbo equivocado. Ahora, ¿hay un camino de regreso? ¿Es posible retomar la ruta correcta cuando te das cuenta que has elegido un camino que parecía atractivo pero que su destino no será satisfactorio?